Explorando la Ley de Polaridad
¿Cómo surge la atracción entre dos personas? Indiferentemente del género, todos poseemos una parte de energía masculina y otra femenina. La polaridad se manifiesta mediante la sinergia que existe entre estas dos energías.
La ley de polaridad te ayudará a identificar la energía predominante que existe en ti, a ver más claramente las barreras que construyes con las personas de tu entorno y a como tu energía predominante influye en el desarrollo de tus relaciones.
Las conexiones más profundas se logran entre dos personas con energías totalmente opuestas. ¿Por qué ocurre esto? Porque más allá de que sea hombre o mujer, en cuanto más marcada esté la energía en cada uno, más atracción habrá. De la misma forma, si las dos personas tienen una polaridad definida similar, la atracción y la conexión disminuirán.
¿Cómo saber cual de estas dos energías estoy cultivando en mi?
Si afrontas la vida con fuerza, rigidez y tienes un sentido muy claro de propósito, entonces es masculina. Si vives una vida desde la apertura, el fluir, la energía y la libertad, entonces es femenina.
Si tu fuerza primaria está basada en cumplir con la dirección y misión que tienes en la vida, entonces es masculina. Si por el contrario está basada en la intimidad, en dar y recibir amor, es femenina.
Si tu foco de atención se inclina hacia la mono tarea, hacer una cosa a la vez, es masculina. Si eres capaz de fluir en una constante de tareas multiples, es femenina.
Si tus metas y objetivos son muy claros y los afrontas de una manera totalmente liberal, tu energía es masculina. Si en cambio están basadas en la belleza, el encanto y el amor, es femenina.
Si tus deseos están ligados al reto y desafío constante, posesiones y sentido de aprobación, es masculina. Si estos deseos están relacionados con la apreciación del fluir de la vida, la naturaleza y el cariño mutuo, es femenina.
Por último aparecen los retos. Si te desapegas de las cosas fácilmente, tiendes a evadirte y utilizas más el sentido del habla que el del oído, cultivas una fuerza masculina. Si te quedas en un espiral de dudas, a veces por un tiempo demasiado largo y presentas un grado mayor de sensibilidad al escuchar y razonar, tu energía es femenina.
Trastornos y confusiones con respecto a la polaridad
Es importante mencionar que la manera como hayamos sido educados y las experiencias que hayamos tenido durante nuestra niñez, adolescencia y juventud influyen muchísimo en nuestra personalidad y nuestro nivel de polaridad.
Si un niño con energía mayormente femenina por ejemplo, de pequeño sus padres le enseñan que llorar ‘no es cosa de hombres’, muy posiblemente crecerá con complejos. Seguramente creerá que no es atractivo para las mujeres, o peor aún, encontrará a una mujer lo que lastime y se volverá un complaciente en sus futuros intentos de pareja.
Si ocurre lo opuesto, y una niña con energía masculina le enseñan que tiene que depender de su marido para todo, esta, en la edad adulta, perderá la esencia de su personalidad y sentirá que los chicos se fijan en chicas mucho más femeninas que ella. Con el tiempo desarrollará un resentimiento fuerte hacia el sexo opuesto y le será muy difícil abrirse y dejarse querer.
Este tema es muy largo y apasionante. A mí personalmente me ha hecho entender mucho mis conductas, corregir supuestos «fallos» e interactuar de manera más natural y abierta con las personas de mi entorno.
¿Cuál es tu energía predominante?
Fuente: Tony Robbins